- Área: 160 m²
- Año: 2013
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Fotografías:Francis Pelletier
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Proveedores: Alumilex, Eames, Goodfellow
Descripción por los arquitectos. La casa del escultor Jarnuszkiewicz, es un trabajo colaborativo entre él y los arquitectos Marie-Claude Hamelin y Loukas Yiacouvakis. El proceso por el cual este proyecto fue concebido sigue los lineamientos de la exquisita técnica de cadáveres surrealistas, donde cada diseñador construye siguiendo el trabajo realizado por el anterior. Cada propuesta escultórica fue debatida entre nosotros hasta que finalmente acordamos expresar la verticalidad como una expresión fuerte y clara de la esencia del paisaje dado; un gran lago que sobresale por la tierra junto a un bosque de coníferas de claroscuros.
Una vez que se establecieron las reglas de composición, el proyecto se desarrolló de la mano de uno y otro creador y de un volumen a otro, desde el manejo de materiales y masas hasta el crecimiento de los espacios interiores. El fraccionamiento de masas, la composición de dos volúmenes de madera, una luz y una oscuridad, la opacidad y la transparencia de los juegos estructurales hacen que la casa se una con la naturaleza y la naturaleza integre la casa.
El plano abierto de la casa ofrece una fluidez y continuidad natural entre el nivel del suelo del bosque y el piso inferior de la casa, entre el interior y el exterior. La experiencia que ofrece el entresuelo en el último piso se completa con una gran terraza cubierta que es una torre de observación de vida silvestre y un mirador panorámico que se abre a las montañas y al lago cercano.
La composición vertical que recuerda a los árboles maduros que rodean la casa, se abre a la luz del día y al majestuoso paisaje gracias a la gran fachada de vidrio que cubre los tres pisos. Al amanecer, los alrededores desaparecen y la casa emerge como una linterna escultórica en el corazón del bosque. Tectónica expresada donde la composición espacial anula la funcionalidad, es una casa escultórica en la naturaleza.